Innovación y Robótica Educativa: Si lo puedes Imaginar, lo puedes construir

​David Astudillo, CEO Fundador de Robotic Minds, ingeniero en marketing con un master en mercadotecnia, especialista certificado en robótica educativa, diplomado en diseño de juegos de video, diplomado en educación STEM – STEAM, experto en planificación institucional, docente universitario, consultor de proyectos de inversión, representante exclusivo de VEX Robotics para el Ecuador y de AEXA Educational Programs, músico hobbista, interesado en la educación disruptiva y apasionado por la neurociencia.

Luciano tiene trece años, cada martes desde hace tres participa de una de sus pasiones, la robótica, considerado el miembro más disruptivo de su familia y uno de los referentes para sus compañeros y amigos, ha encontrado en esta actividad la capacidad de vincular su interés por la ciencia con su creatividad y espíritu investigativo. Habla con premura y hasta se descompone a causa del tiempo que pierde al hablar conmigo en el pasillo, ‘lo que pasa es que debo entrar a mi clase, es de vida o muerte, en Agosto me voy a China a representar al Ecuador con mi investigación y mi robot, y voy por medallas…’.

Usted como lector, se imaginará que esto es un cuento o que Luciano probablemente es producto de mi idea de un personaje motivacional para niños y jóvenes; ciertamente no, él es el resultado de un proceso de innovación educativa orientado a la formación de seres humanos que logren romper los paradigmas educativos heredados en nuestra genética cultural.
​
Pero ¿qué es un proceso de innovación educativa aplicada a la robótica?, de forma muy resumida, es el desarrollo progresivo, articulado y pragmático de dos grupos de habilidades, las de impulso humano como liderazgo, comunicación, actitud colaborativa y creatividad; y, las técnicas o de perfeccionamiento del conocimiento a través de la Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM).

​Varios de ustedes pensarán que eso no tiene nada de innovador, que ya se ha escrito mucho sobre ello, y de hecho la literatura sobre esos temas es extensa y en casos vasta; sin embargo, la pregunta clave es - ¿por qué son pocos los ejemplos de niños y jóvenes que influencian la era digital ecuatoriana a través de la construcción de productos tecnológicos que sean útiles para las personas y las industrias?

​El desarrollo progresivo y articulado de habilidades humanas se facilita con la introducción de la robótica en el aula, es ahí donde la innovación surge puesto que el concepto de una clase tradicional rompe el molde permitiendo que los niños, niñas o jóvenes lideren procesos creativos desde su propio ideario, sustentado sus ideas en el conocimiento teórico, involucrándose en la distribución de recursos y creando relaciones con sus pares, que a pesar de los intereses diversos, a luz de objetivos comunes fortalecen su capacidad de abstracción y de crear soluciones a problemas desde un punto de vista social y técnico.

​Más allá de los recursos que una aula tradicional ofrece, la robótica educativa desde su ámbito pragmático facilita la inmersión y experimentación, el aprendizaje ya no es el conjunto de ejercicios técnicos de costumbre, de un momento a otro la ciencia, matemática e ingeniería sirven para algo y lo más importante es que está al alcance de las manos de niños, niñas y jóvenes. 

¡Adquiere tu propio traje de vuelo personalizado!

Ellos pasan de ser espectadores de los avances tecnológicos a ser involucrados, evolucionando de la segunda dimensión de un pizarrón y un esfuerzo docente puramente cognitivo a las infinitas dimensiones de la creación tecnológica que es desafiante, emocional y que cuando se racionaliza resulta en productos de alcance mundial, así de pronto elaborar un código de programación, crear un sistema mecánico o construir un circuito se naturaliza y define actores que pasan de ser el ‘que’ y se convierten en el ‘como’, los docentes evolucionamos de comunicadores de conocimiento a mentores de ideas y el aula pasa de ser un espacio de repetición de saberes a un conjunto de recursos motivacionales para pensar en soluciones para otros y creer que todo lo que imaginamos lo podemos construir.