Más allá de contarles de mis logros académicos o mi persona, quiero compartir un poco de lo que hago por el amor a la ciencia y lo que ésta nos regala día con día. La segunda parada es en el presente, la mayoría de la población terrestre se encuentra en medio de un colapso emocional y subiendo kilos por cada crisis existencial que se tiene al minuto, el gobierno no sabe qué hacer y todos somos jueces virtuales, porque estamos en la era de la “información” o desinformación para muchos (pero ese es otro tema); aun así luchamos por regresar a esos tiempos donde se decía que el mundo se acabaría en 30 años si no lo protegíamos, y no en el que nos dice que si no cuidamos de nosotros mismos cambiaremos de protagonismo. Hoy, mientras buscamos esperanzas en el cielo y esperamos que en el futuro todo pinte mejor para lograr vivir en otro planeta, añoramos lo que fue de nuestro pasado. ¿Esperas la tercera parada hacia el futuro? Perdón por lo que diré, pero el futuro inequívoco no existe, y sí, con las ciencias exactas se puede predecir, pero no asegurar, por lo que lo único a lo que le podemos apostar es a hacer lo que nos apasiona sin dañar a los demás (desde casa si es posible) y seguir nuestros sueños. A mí me gusta divulgar ciencia en un medio de periodismo científico latinoamericano llamado "Sólo es Ciencia", hacer con mis amigos semanas de ciencia, talleres a niños, incentivar a las niñas al estudio STEM, representar a las ingenierías en nuestro centro universitario y tratar de hacer de este planeta un espacio más consciente. Así como Elon Musk quiere mandar a los humanos a Marte, yo quiero que podamos ser los humanos que Marte merece. Nuestro viaje nunca termina, porque nunca alcanzaremos al futuro y es justo eso lo maravilloso de esta trayectoria, es muy probable que existan bajadas y subidas de tripulantes para este sueño interestelar, pero siempre existirá como motor la esperanza de un futuro mejor.
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October 2024
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